Páginas

viernes, 17 de abril de 2015

Creer para ver... Somos todopoderosos!

No sé, si en un momento de mi vida por un simple principio de supervivencia, me recoloqué la cabeza para creerme las palabras de este título. Aun así, igual que con muchas otras cosas, creo que no vale demasiado la pena entrar en razones. Sin embargo sí puede valer la pena explicarlas y compartirlas. Por eso en los próximos párrafos voy a explicar por encima lo que significan para mí, y por qué han vuelto a mi cabeza no hace demasiado.
Si tuviese que explicar la primera frase, creo que me sobraría con los miles de vídeos que actualmente (16 abril 2015) desbordan la red, relacionados con el coaching, la motivación y otras formas de animar a la gente durante un tiempo de "crisis" -Crisis lo pongo entre comillas porque creo que no es para todo el mundo, y no me gusta estropear la alegría de otros que ahora se encuentran en bonanza, llamándolo así- Me refiero a todos esos vídeos en los que se dice, que si crees verdaderamente en algo concreto, acabas viéndolo y si pones una acción de por medio, ese algo se hace incluso más vivo y tangible.
De esto no te das ni cuenta cuándo eres pequeño.... Al menos no racionalmente... Pero empieza a parecer mucho más claro cuándo, sin comerlo ni beberlo, empiezas a ver la cara de la chica que te gusta en las caras de otras personas que pasean por la calle sin saber nada de ti... O cuándo esperas una llamada y el móvil parece vibrar más de la cuenta... O cuando te sorprendes a ti mismo con una capacidad de predicción sobre ciertos acontecimientos -normalmente rutinarios- que roza lo sobrenatural.
Estos ejemplos podrían ser suficientes para expresar, en cierta manera ese poder de crear ilusiones y de ver el mundo a nuestra manera. Sin embargo, me gustaría poner uno más que siempre me ha gustado. Es uno que hace referencia a nuestros límites.
Durante mi carrera estudié cosas sobre deportes... Entre ellas, cómo mejorar, progresar y mejorar tus resultados cuándo ya estás en "la cumbre" de tu rendimiento. Y hablando de esto descubrí lo que hoy podría llamar "el buen engaño, la "pastilla" contra lo imposible, o algo así".
"El buen engaño" consiste simple y llanamente, en decirle por ejemplo a un halterófilo que en la siguiente repetición, va a levantar su mejor marca, cuándo en realidad va a levantar más, porque nosotros, que somos muy pícaros, hemos sobrecargado un poquito la barra con unos discos aparentemente iguales. O decirle al nadador, corredor, motorista, que su tiempo es peor de lo que en realidad es motivándole a dar un poco más cuando en realidad es incluso mejor de lo habitual... Y en definitiva engañar para exprimir un poco más a todos esos que creen estar en su límite... Para mí, en versión amateur me basta muchas veces con algo de compañía, para hacer más de lo que normalmente creo que puedo hacer (y no solo en deporte)y eso me hace pensar, que no pensar no es del todo malo...
En definitiva, lo que vengo a decir, es que esa capacidad tan nuestra de crear nuestra realidad nos da ese "creer para ver" y el saber hacer uso de ello, o al menos intentarlo y entrenarlo un poco, nos da esa sensación/capacidad de "ser todopoderosos".
Yo he recuperado muchas veces estas ideas. Posiblemente, como ya dije al principio, para ser feliz y punto. Pero posiblemente también, porque desde que empecé a tomar más conciencia de estas ideas y entrenar un poco esas capacidades, me siento más feliz, capaz e incluso mejor persona de lo que era. Porque creo firmemente, que todo se puede ver medio lleno o medio vacío... solo es cuestión de entrenar un poco esos "superpoderes" antes citados para ver todo medio lleno y aportar a su llenado en vez de compadecerse acerca de lo vacío que está todo. Al fin y al cabo el bien y el mal muchas veces me parecen lo mismo.
Por ejemplo; puede verse la droga como el mal del mundo... Pero ¿Podría existir un mundo sin droga? ¿Acaso no es la droga un simple concepto de alteración del estado normal que nunca puede dejar de existir por ser connatural a la realidad? Luego el problema entonces será la dosis y entonces ¿A caso no es todo una cuestión de equilibrio y elección?
Elegir nos hace todopoderosos... Y como también aparece en muchas películas siempre se puede elegir... a veces a costa de la vida... pero esa sí que está sobrevalorada ;DDD! jajja


¡Ah, por cierto! dije que iba a decir por qué me puse a pensar un poco en ese título y no lo he puesto... Pues fue en el momento drogas... Habiendo bebido un poco más de la cuenta dije... Podría existir un mundo sin este tipo de cosas... Qué pasaría si quitáramos todas las que tenemos ahora... y dije coño nada!! DISFRÚTALAS si consideras que debes hacerlo y punto... 

Viniéndome un poco más atrás... algunos vídeos como este más que conocido viral de Will Smith... ayudaron a afianzar mi postura del poderlo casi todo, sin realmente importar casi nada, más que ir tomando decisiones para estar bien (si es que se quiere vivir).



Me pareció bien porque me parece un tío que predica con el ejemplo y es feliz... (Aunque por la ley americana que legisla este tipo de vídeos,  hable casi más de éxito que de felicidad... ;D!)