Páginas

domingo, 4 de octubre de 2015

Resaca sorprendente



Este viernes pasado, por desgracia me pasé bebiendo. Pero no te hagas ilusiones, que no voy a contar una historia trágica, de esas en las que hay peleas, sexo y drogas y encima acaban mal. Sí, bebí más de la cuenta pero si acaso me valió para sorprenderme positivamente en algunos sentidos. Por ejemplo:

¡Golfeando con chicas! quién me lo iba a decir a mí.. quien me iba a decir a mí, que un día iría por ahí hablando con chavalas incluso de sexo y que algunas se mostrarían receptivas.

Bueno pero no me gusta hablar de beber mucho y de resacas en sentido positivo. Para mí, beber más de la cuenta no es nada meritorio, sino más bien lo contrario. Embriagarse más de la cuenta, es algo natural hasta cierto punto, pues bien es sabido que incluso los animales buscan sus formas de "ponerse ciegos" -supongámosles a ellos, la bondad de hacerlo inconscientemente- siendo solo unos pocos afortunados, los gracias a su "autocontrol" no se acercan, o incluso superan la sobredosis. Por poner algunos ejemplos, veasé:

Los gatos y su "albahaca de gatos o menta gatuna" o su valeriana.

Los monos verve o los elefantes africanos, a los que no les parecen desagradar "unas copillas" de vez en cuando.


Borregos, caballos y ciervos salvajes que buscan plantas ricas en "swainsonina" y las prefieren a su "comida sana"

Recientemente leí que incluso las abejas, prefieren las plantas rociadas con pesticidas ricos en nicotina o algún compuesto similar,

Bueno así hasta -acabo de ver ahora mismo en muy interesante (que no digo yo que sea ciencia pura, pero igual no van tan desencaminados)- hasta unos 300 casos por lo visto.

No obstante, aunque drogarse pueda ser algo medianamente natural o "humano" y favorecer que ocurran, o incluso crear algunos momentos maravillosos durante la fase aguda de consumo... Me voy a centrar en lo malo. Porque no me gusta hacer apología de la droga, incluso aunque opine que es algo digno de ser experimentado en algún momento puntual de la vida. Lo malo en este caso fué...  "¡Que falté al partido del Sábado!" En mi vida había faltado a un compromiso real, por una noche de fiesta. Sí que es cierto, que era un simple amistoso, que no requería realmente de mi presencia ni nada... Pero el hecho es, que falté a mi palabra en algo que no era ocio. Y en mis 28 años de edad nunca me había ocurrido, ni pensaba que me pudiese pasar. Pero me levanté tan aturdido, que dije bua no importa.

No importa... Sí que importa, importa porque podría significar que te estás haciendo viejo y ahora, una resaca que tampoco era nada extremo, te puede hacer volver a la cama y conformarte con la recuperación horizontal. Además de implicar que has faltado a una obligación, por una simple fiesta voluntaria. Eso no está bien.

Bueno a mis compañeros de equipo espero que me perdonen, y a los demás...

Aceptemos que somos humanos y que éste ser, tiene esas mundanas debilidades, que le hacen incluso destruirse voluntariamente por una sobredosis de placer... Pero no seamos idiotas y no nos engañemos... Cuanto menos humanos seamos en ese sentido, mejor para nosotros y sobre todo para los de nuestra especie.

No sé distinguir entre malo, bueno, bueno y malo... Nunca lo he sabido, ni creo que llegue a saberlo. Pero si hay que elegir... Vamos a intentar tirar para la supervivencia sana de la especie y el compartir momentos bonitos con los demás, sin utilizar mucho "edulcorante" pues el hedonismo también puede ser SANO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario